Las medias de compresión tienen un efecto preventivo y terapéutico que ayuda en gran medida a que la circulación sanguínea en nuestras piernas mejore.
La insuficiencia venosa crónica (IVC) es un problema de salud que se debe a un mal funcionamiento del sistema circulatorio. Afecta a entre el 20% y el 30% de la población adulta española, siendo cinco veces más frecuente en mujeres que en hombres.
Las paredes de las venas de las piernas contienen unas válvulas diminutas que impulsan la sangre hasta el corazón
Pero, si las venas pierden elasticidad y se deforman, estas válvulas no cierran bien y la sangre, atraída por la fuerza de la gravedad, se acumula en las venas, provocando que aumenten de tamaño y se formen las varices.
Esto se traduce en síntomas como pesadez e hinchazón de las piernas (edemas); hinchazón en las piernas que empeora cuando se está de pie o con el calor; dolor y picor; cansancio, hormigueo; debilidad; calambres nocturnos; y varices.
El uso de la terapia con medias de compresión es recomendable ante la aparición de varices y arañas vasculares, tras intervenciones quirúrgicas venosas y en escleroterapia, ante edemas y alteraciones varicosas durante el embarazo o por actividad profesional. Las medidas de compresión también pueden emplearse como medida de prevención de trombosis y úlceras.
Las medias de compresión tienen un doble efecto preventivo y terapéutico de los problemas venosos.
Existen medias con diferentes niveles de compresión dependiendo del estado que presente la enfermedad,
-Compresión ligera y normal
– Compresión fuerte
Las medias de compresión están fabricadas con materiales elásticos como elastán, poliamidas y otras fibras, lo que les permite generar presión sobre las piernas, tanto cuando están en movimiento como en reposo. También se pueden fabricar con hilos antibacterianos de forma que prevengan infecciones por bacterias y hongos y eviten malos olores.
ALGUNOS TRUCOS INTERESANTES
Evitar roturas: aunque las medias de compresión son muy resistentes, si crees que hay riesgo de rotura, mejor usa unos guantes de goma, como los de cocina, para colocarlas.
Mejorar la adherencia de la silicona: si estás usando una media larga con banda de silicona, puedes mejorar su adherencia humedeciendo ligeramente dicha banda.
Si te aplicas crema hidratante tras la ducha conviene dejar que se absorba bien antes de colocar la media, especialmente si es una media larga con banda de silicona. De lo contrario, pueden surgir problemas de adherencia.
En los meses de calor es tentador dejar de ponerse las medias, a pesar de que es cuando más se necesitan. Por ello, se recomienda realizar algunos ajustes que facilitan el uso cotidiano: si eres usuaria de pantys , pásate a la media larga o corta; y si eres usuaria de compresión normal, pásate a la ligera. Lo importante es no renunciar a la terapia y la prevención.
En personas con dificultades para ponerse las medias (por la edad o durante el embarazo) o si tienes a tu cargo a una persona mayor que no puede ponérselas sola, una buena opción es utilizar un CALZADOR de medias.